Se nos vino Marzo 😱
Por Sergio Tricio
Para muchos, el mes de marzo es complejo. La vuelta al trabajo y a las clases tras un típico mes de vacaciones en febrero, sumado a varios pagos que históricamente se juntaban en este fatídico mes, se caracterizaba por un aumento relevante en los gastos.
Por ende, en muchos casos, también se asociaba a la solicitud de créditos con sendas promociones por parte de las instituciones financieras. Más de alguno se acordará del pegajoso comercial de uno de los mayores bancos de la plaza, que por varios años hizo popular su comercial “se nos viene marzo”.
Bajo la misma lógica, es posible que se pueda venir un complejo mes de marzo para los mercados, presionado por el aumento de las expectativas de inflación, el aumento de las tasas de interés y finalmente, a raíz del explosivo incremento de la deuda tras la pandemia, los riesgos propios de posibles insolvencias a futuro de empresas e incluso gobiernos.
En este contexto, debemos tener muy presentes los riesgos a los que nos enfrentamos de cara a los próximos meses, más aún, cuando los mercados han alcanzado máximos recientes y el vértigo a la altura se hace cada día más presente.
Si quieres aprovechar las oportunidades en estos mercados rezagados, entra a capitaria.com, déjanos tus datos y te contactaremos para responder tus preguntas.
Fortalecimiento del dólar
La debilidad del dólar suele acompañar las amplias recuperaciones económicas a nivel global. Sin lugar a dudas, la década del 2010 fue extraordinaria para EE.UU. y con ello pudimos ver un fortalecimiento de su moneda. En cambio, Japón, China y Europa, les costó mucho recuperar el ánimo y volver a crecer con fuerza tras la crisis subprime del año 2008.
En los últimos meses hemos visto la reversión de estas tendencias. El dólar índex ha caído un 13,2% desde los máximos de marzo y con ello hemos podido presenciar un fortalecimiento de otras monedas como el euro y el yuan, acompañado de una vigorosa recuperación de materias primas ligadas al crecimiento económico como el petróleo y el cobre.
Por lo tanto, si comenzamos a presenciar una recuperación del dólar, podría afectar a los mercados emergentes y a las materias primas, lo que originaría una sana corrección después de las imparables tendencias alcistas de todos estos activos.
Aumento de las tasas de interés
Sin lugar a dudas que la gran preocupación de los inversionistas en los últimos días ha estado enfocada en la evolución del bono del tesoro a 10 años de EE.UU. el que ha subido un poco más de 100 puntos bases desde el 0,51% de agosto del año pasado hasta un máximo en los 1,61% hace pocos días.
¿Qué es lo que nos estarían diciendo la evolución de las tasas?
Que a pesar de las recientes declaraciones dóciles de Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal de EE.UU. el mercado no lo estaría tomando en cuenta.
Powell no ha variado su postura de mantener los estímulos por un largo periodo de tiempo, a pesar de enfrentar una mayor inflación, lo que debería mantener las tasas de interés contenidas, pero esto claramente no ha ocurrido.
Recordemos que las tasas de interés de los bonos reflejan por un lado las expectativas de crecimiento y por otro las expectativas de inflación.
Si a futuro el mercado anticipa una recuperación económica vigorosa, tarde o temprano se generará una presión en los precios de productos y servicios.
Al incubarse un sobre-calentamiento de la economía, la misión de los bancos centrales, para controlar el aumento en los precios, es cambiar su postura actual a una política monetaria más restrictiva, a través de un aumento de las tasas de interés, lo que precisamente estaría anticipando ahora el mercado.
En el gráfico siguiente, se puede observar como han aumentado las tasas de los bonos de 10 años en EE.UU., Japón, Alemania e Italia.
Asimismo, si consideramos los niveles actuales de tasas, existe una amplia brecha a favor de EE.UU., lo que estaría también impulsando al dólar en los últimos días, asociado a operaciones de carry trade.
Fuente: Bloomberg
Es probable que los mercados financieros se normalicen y con los niveles de tasas actuales, permitan que las bolsas, más allá de una sana corrección, puedan volver a recuperar el tranco perdido, teniendo en cuenta que los estímulos seguirán estando ahí.
No obstante, si observamos un incremento en las tasas mucho mayor, el que podría estar asociado a un incremento en la inflación, es probable que veamos una corrección más profunda y duradera.
En resumen, deberíamos estar muy atentos en el futuro las cifras de inflación de las principales economías desarrolladas, especialmente en EE.UU. y seguir mirando de cerca el comportamiento de las tasas de interés de los bonos a largo plazo.
La deuda es buena hasta que…
Existe un equilibrio mágico entre acceder a un máximo nivel de deuda, versus las tasas de interés que se deben pagar por ese acceso al crédito. Si las tasas de interés son bajas y los beneficios de ese acceso al crédito son mayores, podríamos decir que deberíamos tomar el máximo de deuda posible.
Sin embargo, si las tasas de interés aumentan y, por ende, el costo financiero aumenta en forma significativa por haber aumentado en exceso los niveles de deuda, hacer frente a los compromisos se hace cuesta arriba. Esto les pasa a las personas, las empresas y por supuesto a los gobiernos.
Por lo tanto, la deuda es buena hasta que… las tasas de interés se hacen insostenibles para poder pagar de forma adecuada y no genera desequilibrios financieros que puedan implicar una eventual insolvencia.
Desde ese punto de vista, el mundo ha estado caminando sobre una cuerda floja en que los equilibrios son frágiles. Si las tasas siguen bajas, no hay problema, pero si aumentan, el impacto para los gobiernos puede ser complejo.
Para poner en contexto algunos datos clave:
· Los gobiernos, las empresas y los hogares recaudaron US$24 trillones el año pasado, lo que elevó el total de la deuda global a un nivel máximo histórico de US$281 trillones. Tomando en consideración la relación “Deuda/PIB” a nivel mundial, aumentó en 35 puntos al 355%.
· Los países europeos experimentaron incrementos históricos en los ratios de deuda en 2020. En algunos casos como Grecia alcanzando niveles del 200% sobre el PIB y en Italia, cercanos al 150% de PIB.
En consecuencia, el aumento de la deuda puede llevar a situaciones riesgosas en las personas, empresas y gobiernos. En el contexto actual, a pesar de lo necesario que ha sido aumentar el gasto fiscal y la deuda, un incremento de las tasas, puede tener serias consecuencias para la sostenibilidad financiera de algunos países.
Conclusiones
Se nos vino marzo y parecido a lo que pasa en Chile, con las dificultades que conlleva volver al trabajo o a los estudios, los mercados financieros también estarían enfrentado días difíciles, con la actual corrección de las bolsas por el incremento en las tasas de interés.
Será muy importante vigilar de cerca lo que ocurra con las cifras de inflación y especialmente con el comportamiento del bono del tesoro a 10 años de EE.UU. Adicionalmente, una recuperación del dólar es posible en el corto plazo, lo que también podría ser un catalizador que impacte en las bolsas.
Más allá de estas evoluciones de corto plazo, era esperable observar una corrección en los mercados, especialmente en algunos instrumentos que habían alcanzado niveles algo exagerados.
Sin embargo, los estímulos monetarios y fiscales siguen ahí. Las autoridades no se pueden permitir aflojar en plena recuperación económica, tras la enorme crisis vivida. En consecuencia, más allá de una corrección de corto plazo absolutamente necesaria, creemos que este año seguirá siendo favorable para los mercados y especialmente para las acciones.
¿Quieres aprovechar el crecimiento potencial de estos mercados el 2021?
En Capitaria puedes hacerlo en 3 simples pasos:
Crea tu cuenta sin costo
Deposita los fondos a invertir
Opera en el mercado financiero con un solo click 📈
Si quieres saber más, entra a capitaria.com, déjanos tus datos y te contactaremos para ayudarte a empezar.