Inversión en IA: ¿euforia transitoria o tendencia sólida?
- Matías Cortés
- hace 2 días
- 6 Min. de lectura
¿Podemos estar frente a una nueva burbuja de la inteligencia artificial? Similar a lo que fueron las dot-com en su época.
En el último tiempo, los inversores han perdido el optimismo por la IA y han empezado a invertir con más cautela. Si bien el uso de la tecnología ha ido incrementando considerablemente desde sus inicios, y hoy vemos que prácticamente está en todos lados, las ganancias no dicen lo mismo. Todavía no se pueden justificar las enormes cantidades de dinero invertido, sin llegar a generar las utilidades que todos los inversionistas esperan.
¿Qué pasará con el ánimo de los inversores? ¿Se podrá mantener la inversión de la IA en los niveles que hoy vemos?
En esta nueva versión del boletín financiero intentaremos responder a esas preguntas con señales de lo que está ocurriendo hoy en el mercado. También, y para no dejar fuera, incluimos un análisis de lo que ha estado pasando con las criptomonedas y el USD/CLP.
Nvidia no resistió la fuerte caída en el sector tecnológico
La compañía publicó el miércoles 19 de noviembre, al cierre de mercado, sus reportes de resultados correspondientes al último trimestre fiscal. El informe fue sólido, lo que refleja una continua demanda por chips de inteligencia artificial.
Las ventas trimestrales superaron los 50.000 millones de dólares, una cifra récord en la historia de Nvidia. Estos resultados superaron ampliamente las expectativas que tenían los operadores de Wall Street, lo que provocó un ánimo positivo en los inversores, viendo un aumento del 5% en el precio de sus acciones. Sin embargo, esa subida se disipiso el jueves, cayendo un 10% el precio de su acción a los 174 dólares. Hoy cotiza en los 182 dólares.
A pesar de los extraordinarios resultados que entregó Nvidia, el sector de la inteligencia artificial vive un momento complejo.
El viernes 21 de noviembre, el índice Nasdaq, que agrupa las compañías tecnológicas más importantes y relevantes de Estados Unidos, cayó un 2,4%. Uno de los factores que han influido en su descenso se puede atribuir a los débiles datos de empleos presentados el jueves, evidenciando un aumento en la tasa de desempleo del 0,1% en comparación con el mes anterior, a un nivel total del 4,4%.
Un segundo factor que ha provocado que los inversores estén "castigando" las acciones tecnológicas ha sido la preocupación de que muchas compañías están invirtiendo demasiado en centros de datos, chips y otras tecnologías en IA, con pocas esperanzas de que puedan recuperar su inversión en corto plazo.
Otras compañías relacionadas con la IA también han visto cómo cae el precio de la acción. Micron Technology ha caído un 16% en la última semana. Western Digital retrocedió un 11% en los últimos 7 días y Advanced Micro Devices (AMD) un 18% en el mismo lapso de tiempo.
Según datos entregados por JPMorgan Chase, la semana del 17 de noviembre, los inversionistas minoristas liquidaron sus tenencias en acciones en distintas compañías valoradas en aproximadamente 728 millones de dólares.
Las preocupaciones sobre la IA y las expectativas sobre un posible recorte de tasas de interés de la Fed en diciembre, sin duda que están generando temor en el mercado.
¿Será el momento de buy the dip?
¿Seguirá siendo sostenible el negocio de la inteligencia artificial?
Los inversores muestran ciertos nerviosismos a que se avecine una nueva burbuja. Distintas señales están mostrando elevadas valoraciones y los agresivos planes de gastos que están teniendo las compañías que están invirtiendo en IA.
Hoy los problemas radican en una premisa muy simple: entregar servicios de inteligencia artificial cuesta más de lo que pagan los clientes. Eso quiere decir que el negocio no está siendo rentable y sostenible en el tiempo, ya que mientras más clientes atraen las empresas, más dinero pierden.
Por otro parte, el número de clientes que usa la IA genera esperanza en los inversores que siguen invirtiendo, confiando en que se produzca ese círculo virtuoso y que la tecnología empiece a dar frutos de ganancias.
El capital que ingresa por parte de los inversores genera que se contraten más programadores, para subsidiar a más clientes, para luego invertir en gran escala en la infraestructura que permita desarrollar mejores productos por el que los clientes paguen el precio correspondiente por su uso. Eso sería lo ideal, pero en la práctica está ocurriendo todo lo contrario.
Los inversores se están dando cuenta de algo. Que la confianza se está disolviendo y que no quieren seguir financiando este tipo de tecnología, que tiene un desarrollo incierto. No existe seguridad de que la inteligencia artificial pueda llegar a generar las utilidades que todos los inversionistas esperan.
Un signo de que la confianza en la IA se está debilitando fue que, hace pocas semanas, Nvidia y Microsoft se comprometieron a invertir 15.000 millones de dólares en Anthropic, que a su vez se comprometió a invertir 30.000 millones de dólares en capacidad informática en Microsoft, utilizando los chips de Nvidia. Dicha noticia debería haber movido el precio de las acciones de las compañías involucradas, pero no ocurrió.
La discusión se está centrando en si todo el gasto en chips e investigación para la IA llevarán a ganancias lo suficientemente cuantiosas para justificar las enormes cantidades de dinero desembolsadas como inversión.
Un tiempo atrás, la respuesta a esa interrogante hubiera un SI rotundo, pero en la actualidad, el entusiasmo y confianza de los inversores se empieza a desvanecer poco a poco. No existe evidencia concreta es que la respuesta sea un NO, las acciones de Nvidia siguen subiendo al igual que Microsoft.
Lo que está ocurriendo es un freno por parte de los inversionistas a las grandes inversiones en IA, hasta que verdad comprueben, y con la esperanza de que un futuro cercano haya máquinas realmente capaces de superar a los humanos y poder capitalizar ganancias del capital invertido.
Los inversores seguirían creyendo en que la IA es el futuro, quizás de manera más cauta, pero aún estamos muy lejos de una burbuja en inteligencia artificial.
Bitcoin se desploma por debajo de los 85.000 dólares
En solo un día, la mayor criptomoneda del mundo cayó alrededor de un 9%. Todo lo que había ganado durante el año, en menos de una semana lo perdió. ¿Veremos una pronta recuperación a sus máximos históricos en los $120.000?
Para contextualizar, la abrupta caída de bitcoin ha sido la peor desde el 2022, a raíz de la quiebra de distintas plataformas de criptomonedas, incluyendo el colapso de la plataforma FTX. El viernes se liquidaron alrededor de 2.000 millones de dólares en operaciones con criptomonedas, lo que provocó que bitcoin descendiera por debajo de los 81.000 dólares, según datos recopilados por CoinGlass.
Distintos analistas han dicho que en estos momentos no se puede atribuir una razón en particular a la abrupta caída; aseguran que hay un malestar general, sin un desencadenante específico que explique la razón en el mercado.
A pesar de que las monedas digitales han tenido la aprobación por bancos y funcionarios federales, todavía sigue ese temor de que las criptomonedas son un activo antisistema. Dicha desconfianza viene arraigada de la crisis financiera del 2008-2009 que no ha sido fácil superar.
Todos creían que con la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, las criptomonedas iban a conseguir todas las instituciones, aprobaciones de ETF y todo lo que se soñaba sobre las monedas digitales, pero en la práctica no fue así, y el mercado no ha reaccionado como se esperaba.
Algunos como Jamie Dimon, CEO de JPMorgan Chase, han dicho que las criptomonedas siguen luchando para liberarse de su reputación de ser la hermana pequeña de Wall Street, además, ha calificado la industria como un fraude, estafa piramidal y una colección de piedras de compañías.
Los recientes descensos de bitcoin han arrastrado a distintas compañías que cuentan con enormes volúmenes de tenencias en criptomonedas. Un caso es Strategy, que ha visto reducir su capitalización de mercado en más de la mitad, hasta aproximadamente 50.000 millones de dólares, desde un máximo de 128.000 millones de dólares en junio. Desde el 9 de julio de este año, el precio de la acción ha caído un 62%, pasando de 448 dólares a 169 dólares en solo 3 meses.
La multitudinaria venta de ETF spot de bitcoin también ha dañado la confianza en el activo digital. En noviembre, los inversores han vendido más de 4.000 millones de dólares de fondos cotizados en bolsas de bitcoin y Ethereum en principales emisores como BlackRock y Fidelity, según datos de JP Morgan.
Por otro lado, el presidente de MoonPlay, Keith Grossman, dijo que las criptomonedas calman los nervios, y si eres de los que lleva mucho tiempo en el mundo de los activos digitales, nada de esto te debería afectar.
Tipo de cambio USD/CLP
El dólar en Chile cotiza en la zona de los $937, en una mañana marcada con un tono levemente positivo, marcado por el inicio del periodo navideño en EE.UU. y la expectativa por el comportamiento del consumidor durante Acción de Gracias y Black Friday, claves para medir la fuerza del gasto previo a Navidad.
A la vez, el mercado sigue atento a señales desde la Fed, mientras las criptomonedas mantienen su presión bajista. La probabilidad de un recorte de tasas en diciembre vuelve a subir hasta 75%, fortaleciendo la postura que brinda margen a un nuevo recorte.
Hoy tenemos la publicación de reducción industrial de septiembre en EE. UU. no tendremos mayor publicación de datos ni declaraciones, por lo que a estar atentos al consumo retail y la variación en las probabilidades de recortes de tasas.
En el plano internacional, el cobre cotiza a la baja en los US$ 4,9 la libra en COMEX, mientras que el Dollar Index respeta los 100 puntos y cotiza en los 99.900 puntos actualmente.
El día de hoy se verá marcado por el avance de las expectativas de recortes de tasas por parte de la FED que podrá generar movimiento por datos económicos de EE. UU. y la publicación de la producción industrial a las 11:15 am por parte de estados unidos
Fuentes consultadas:
JP Morgan Chase
The Wall Street Journal
CoinGlass




